Me llamo la MaLquErida, alias Flor de María. Soy abuela, tengo muchos años, escribo cosas que a veces llaman la atención. Compongo cuentos con palabras que me voy encontrando en la orillita de la vida. La mayoría de las veces escribe la otra yo.
Estoy aquí de nuevo presentándome ante los que no me conocen. Los que me conocen saben que soy una mujer de pocas pulgas, con el carácter pegado al gatillo de mis enojos. Disparo a la de ya, luego averiguo. Ya pa'qué si me cargué un muertito a salud de la agenda de pasta negra donde borro a los que fueron y anoto a los que quizás. Consciente de lo que hago no hay lugar para más. Bueno sí, guardo mucho en la libreta de las verdades
Hay quienes entran en mi vida para conocerme un poco más. Lo poquito que asome más allá de mis pestañas de burro. Me quiero, sí, muchos dicen que no. Me trato mal a veces, cuando el autoestima batalla por no caer.
Pasado el tiempo que fue, digo que entré a blogger queriendo que supieran de mí. Hoy eso no es tan importante. Cuando entré a este mundo creí ser una chucha cuerera, sabionda, orgullosa y un tanto presumida.
Con el paso del tiempo reconozco que mi 'sabiduría' era nada comparada con lo que he aprendido a lo largo de estos años. La caída desde la altura de mi tabique fue estrepitosa. ¡Tómala barbón!
Estuve escribiendo para no olvidar.
Es muy emocionante sentarse de nuevo frente a una computadora. Mis dedos se fueron agilizando poco a poco. Algunos no reaccionan, se quedaron inmóviles a falta de práctica, pero escribir es como -creo yo- la sensación de volver a caminar libre y feliz.
La memoria sufre deterioros. Olvido nombres de objetos. Por las mañanas el cerebro eyacula los últimos residuos de somníferos. La mente recobra la claridad en espacios de tiempos oscuros. Las pesadillas se han vuelto sueños apacibles en los que por igual me da por gritar.
Desaparecieron las caracolas en mi pelo. Se volvió gris, lacio como los días insufribles de calor. Ya no odio a nadie, ignorar es mejor. Si me dicen adiós no hay marcha atrás. Los adioses son para siempre. Cultivo pocas amistades, ya no lloro. Sigo soñando con Enrique -hace poco soñé que era mi novio- y hago reír involuntariamente a mi familia. Mi nieta dice que soy una abuela rara.
Sigo haciendo textos largos, cuesta trabajo parar cuando comienzo a darle al teclado.
Es lindo volver a escribir en mi computadora -gracias a El Jefe- recordé a la MaLquEridA que olvidaba todo con tal de escribir en el blog.
Tanto tiempo ha pasado.
Soy la MaLquEridA, alias Flor de María, soy abuela, poseo la habilidad de bailar sin ritmo. Me convierto en robot, tipi tipi tom tipi tom. El pp juega conmigo a sacarme de equilibrio, a medir el suelo con mi cuerpo y a comerse mi memoria todos los días como una boa tragándose un cordero.
Soy la que no pedí ser, pero la que el puto destino escogió. Pudo haber sido peor pero también pudo ser mejor.
Y ora si ya me voy, Laura antes era mi hija. Hoy es la persona que me ayuda a no olvidar. Me cuida como si fuera su hija -también me regaña como tal- es mi amiga, mi hija, mi amiga mejor.
Me hubiese que la vida fuera de otra forma, pero Dios no cumple antojos ni endereza jorobados.
Es lo que hay.
a este pirata siempre le es un placer leerte.
ResponderEliminarbesos filibusteros
Me encanta el redescubrimiento de estos apuntes, que son como la tinta sangre de tus días, de tus recuerdos, de tus enojos y de esa vida interior tan rica que cobija tu piel.
ResponderEliminarUn gusto leerte, y me deja una sonrisa, como siempre :-). Un abrazo inmenso
Hoy me emocionaste realmente, sí lo se, sensiblera que es una, pero ya sabes, la Ay Carmela, siente predilección por la Malque.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo de esos que me gustaría darte en persona.
Si pareces una chamaquita...
ResponderEliminarComo decía mi padre si uno no se quiere, quién le va a querer?
Y escribe, escribe, y escribe... con esos deditos mágicos que la vida te regaló.
El resto, es lo que hay... ni modo.
Cariños, MaLquE.
Es un privilegio leerte. Te mando abrazos!!! Saludos!!
ResponderEliminarLo que hay me gusta mucho.
ResponderEliminarBesos.
Yo te conozco y sé que tienes muchos años pero aún no has llegado a la tercera edad. Lo tuyo es mucho cuento, cuentacuentos, y este cuento ya lo sé. Escribe otro que no sepa. Y no tardes que soy un poco gruñón. Recuerda. Beso.
ResponderEliminarSalud.
Que por siempre podamos pasar por aquí a darnos una ducha de realidad mágica.
ResponderEliminarBesos.
Eso de intercambiar nombre y alias ha estado bien. La verdad es que lo de Malque se ha impuesto. Otra cosa es que alguien se crea que es malquerida una mujer adorada como tú. Es precioso lo de “componer cuentos con palabras que te vas encontrado por la orillita de la vida”. ¿De verdad crees que todavía hay alguien que no te conoce? ¿A quién habrá salido esa nieta tan aguda? Y no comento más cosas, porque voy a releerte.
ResponderEliminarBesos, la MaLquErida.
He llegado aquí gracias a una “Macondografia” y mi gran curiosidad... y quedé atrapada, agradablemente atrapada. Sigo leyendo a una mujer muy interesante, inteligente y siempre por descubrir.
ResponderEliminarUn beso.
Querida Malque: no recuerdo cómo llegué a tu blog, de verdad, no me acuerdo. Sé que te conocí en el blog de Toro.
ResponderEliminarPero lo que descubrí al conocerte fue a un ser humano maravilloso. Te quiero mucho y agradezco a Dios el haberte conocido. Nunca te olvido. Ni te olvidaré.
Nunca.
Un ejemplo de ternura y fortaleza. Un amor de persona. Una buena persona. Y eso es lo más grande.
Eres de esas personas en mi vida que están en mi corazón. Que están presentes en mi vida.
Un beso, con todo mi corazón. Otro para Bella y Laura.
La ternura de Malque es para mí inolvidable.
Querida Malque siempre. Tierna, simpática de verdad y buena. BUENA. ENTRAÑABLE. FLOR DE MARÍA. UNA FLOR. Un beso.
Mi 'contadora de cuentos preferida' :)
De tu RosaRosita :)
Malque, te quiero mucho. Gracias, siempre.
Disparo a la de ya, luego averiguo.
ResponderEliminarApuntes deliciosos que hacen que pueda conocerte mejor.
Es lo que hay. Y lo más importante... es aceptarlo.
Que si no la vida se nos queda demasiado atrás... y a algunos, es mejor que no nos paren.
Un abrazo enorme.
Me encanta leerte porque aprendo cada vez que entro aquí muchísimo de ti. Gracias por compartir tu vida y por hacer que la nuestra sea más amena.
ResponderEliminarAbrazossss. Cuídate mucho
Hola Malquerida, acabo de regresar a escribir y leerte, tuve un lapsus de varios años sin inspiración y sin ganas de nada , me da gusto leerte de nuevo, un abrazo.
ResponderEliminarCreo que a todos nos hubiera encantado que nuestra vida fuera de otra manera, haber cambiado alguna circunstancia...
ResponderEliminarPero como tu dices, es lo que hay.
Seamos algo conformistas para no vivir sufriendo.
Un besito Malque ♥
www.somosfuego.blogspot.com
Desde hace tiempo te he pensado, me da gusto saberte bien y con el mismo humor de siempre.
ResponderEliminar