Babito cuando tenía todos sus dientes |
Estaba segura que uno de mis chihuahuas era Doberman Pincher pero ya vi que no porque sus patas son gordas y mi perrito tiene flaco todo incluso el cerebro -sin ofender- de otra manera no entiendo su afán de buscar problemas con perros que le duplican y triplican en tamaño.
Salir corriendo de la casa, dar una voltereta en el aire, levantarse echo la cochinilla, aventarse sobre un cachorro de raza peleonera -Pitbull- que le duplicaba en tamaño fue todo uno.
Sin medir el peligro se abalanzó sobre el cachorro al que su dueño llevaba cadena en mano.
¡Bababa babbaba! -Babo Alejandro no ladra como todos los perros- él ¨dice¨ ¡Babababa babababa! enseñando los colmillos.
Pues vaya, eso hizo con el cachorro al momento que le tiraba la mordida en el cuello. Sin más, el pitbull le puso una pata en el lomo como diciendo -Tranqui pinche perrito, no te quiero partir tu mandarina en gajos- mientras Babo seguía con su ¡Bababa bababa!
Quise agarrarlo pero la verdad sea dicha, cuando Babito se enoja no conoce dueño ni nada. Entonces el muchacho lo levantó y se lo dio a Barry al momento que le decía -Ya se le cayó el diente!
Babito le tiraba mordidas al muchacho y él simplemente lo mantenía lejos de su cuerpo.
Babito le tiraba mordidas al muchacho y él simplemente lo mantenía lejos de su cuerpo.
Volteé, vi a mi chihuahua con el hocico sangrando y su diente en la banqueta. -¡Jesús bendito!
¡Oh dios de los perros ayuda a mi Babo!
El dueño del cachorro se me quedó viendo mientras decía -Lo siento- y agarraba camino junto con el cachorro que se fue muy orondo ¡Lalara lará!
Sin haber peleado había dejado chimuelo a un perrito valentón.
-No te preocupes- contesté mientras miraba a Babo escupiendo sangre, ¡Snif!
Nos metimos a la casa
Barry lo acariciaba para tranquilizarlo.
Benito Tiki se acercó a olisquearle el pene -A Babo no crean que a Barry- y se le quedó viendo como si dijera: -Eso te pasa por bravucón pinche perrito cuándo aprenderás- todo eso le dijo, lo supe porque lo vi en su mirada.
Benito Tiki cómodamente viendo lo sucedido |
Entonces Babo se echó en su camita quedándose ahí por el resto del día. El diente quedó en la banqueta como clara muestra de su derrota.
¿Cuándo aprenderá a no ser impulsivo? Con eso que dicen que todo se parece a su dueño. Al menos a mi no me han roto el hocico... aún, pero de que he estado cerca eso júrenlo.
¡Babababa bababa!
¡Babababa bababa!
No, no fue una derrota, pobrecito, no lo ningunees, el diente prueba que fue un acto de valor perruno e inconsciente impulso de bravura temeraria :))
ResponderEliminarBesos y salud
Tienes razón Genín, no fue derrota, pero me da coraje que sea tan impulsivo porque no es la primera vez que le pasa. La otra vez lo aventó un taxi y se pegó en la cabeza, snif. Y la otra vez le dio una revolcada un perro mil veces más grande que él.
ResponderEliminarEn cambio Benito Tiki es muy prudente aunque si se trata de partirse la madre lo hace a pesar que ya no tiene dientes.
Reflexioné Genín pido disculpas.
Un besote
Jajaja. Ay, pobre... Si es que siempre digo que lo malo de ser un chulo es que, en algún momento de tu vida te encontrarás con alguien más chulo que tú. Besotes!!!
ResponderEliminarJajajaja! qué quieres, es la educación que le inculcaste con el ejemplo....
ResponderEliminarBesos, querida Bien!
Cuantas muelas hemos dejado en el camino por culpa de un disgusto?? muchas y por suerte tenemos 52 mas.
ResponderEliminarBesos
Es un guerrero sagrado.
ResponderEliminarLe da igual el enemigo.
Un campeón!!!
Besos.
Me recuerda a Zeppo, un fox terrier que tuvimos en casa y sobre el que hice una entrada hace unos meses. Igual de pequeño e igual de chulo. Recuerdo cuando se enfrentó a un dogo alemán, la cara de sorpresa de éste. Se lo quitaba de encima con la nobleza de no querer hacerle daño a quien no daba la talla para ser su contrincante.
ResponderEliminarBesos.
ooh pobrecito! bueno, es algo que he notado en los perros pequeños, que son por asi decirlo, medio loquitos! mi prima tiene un snauzer (se escribe así?) y creeme Patricio (asi se llama) no mide el peligro!
ResponderEliminarYo quiero uno igual, tienen que tener temperamento de todos modos :)
ResponderEliminar¿Y lo llevaron al mèdico de los perros?
Debería ser menos impulsivo ¿pero como se le explica eso a un perro?
ResponderEliminarBesos, buen finde amiga
:), lindo , qué lindas son las mascotas.
ResponderEliminarUn beso.
no, importa. siempre hay una revancha para los valientes a la vuelta de la esquina, je.
ResponderEliminarbesos
Es una demostración más de que los perros se parecen a sus dueños. Lo digo por el Pitbull y su cuidador, que espero sea éste tu mensaje; si no, gracias de todos modos por haber puesto a esa raza como no agresiva, cosa difícil de entender por/para muchos.
ResponderEliminarAhahaha mi Busiro, mi perrito pequeñito siempre está de pelea en pelea, es hermoso, lo amo, siempre son tan lindos, y el tuyo ni que decir, no lo regañes owww, Abrazos
ResponderEliminarMira que ocurre lo mismo con los chatos borrachos, por alguna razón siempre quieren bronquearse con los más altos y agarrados.
ResponderEliminarYo y mi perrita compartimos la impulsividad.No medimos fuerzas ni miradas en el opuesto, simplemente actuamos...Es nuestro carácter y creo que a estas alturas no cambiaremos. En fin, quizás lo logremos. Abrazos para ti.
ResponderEliminarEsas peleas callejeras Malque, dan tanto de sí!!!! Besitos guapa.
ResponderEliminarAwwww pobre de Babo, y lamento creer (y comentarte) que quiza no recapacite nunca respecto a los peligros a los que no debe exponerse, pero que o ceda el amor por ello, ya ni qué caray :-/
ResponderEliminarHermoso estilo de relato Malquerida. Van apapachos y buena vibra para vos ;-)
Espero que nunca se te rompa el hocico Malque jaja.
ResponderEliminarMe gustó el relato, creo que ya va en su naturaleza hacerse los bravucones.
La primera imagen, cuando aún tenía todos sus dientes, es muy graciosa y la segunda (como ya lo conoces de la foto anterior) te roba una sonrisa.
Besos
jajaja asi son algunos perros.
ResponderEliminarlamentablemente no sabemos lo que estan pensando para hacer esas locuras
Lo bueno de los animales es que por más que pase el tiempo, siguen siendo capaces de sorprendernos, la gente, en cambio, pasa el tiempo y más nos decepciona.
ResponderEliminarSaludos
J.
ESo de los bravuconadas, en otro contexto me recuerda las peleas de los tiempos de novios en el colegio, por una hembra. Había trompadas. Yo las resolvía con canciones. Bello tu perro, y tu crónica, una ternura, por eso amor que les tienes a tus canes. UN beso desde aquí de Colombia. Carlos
ResponderEliminarMi perro era un criollo con cierto aire de pastor alemán, siempre fue un peleonero. Creo que mucho se parecen a sus dueños.
ResponderEliminarSalu2!!
Pequeño David buscando su destino... Un abrazo.
ResponderEliminarAy pobetitooooooooo!!! Pero tiene que aprender a respetar a los más grandotes. Es que él los protege a usteeeedes!
ResponderEliminarY Benito es un bellooooooooo! Su miradita es hermosa!!!
Me reí demasiado con lap arte de "le olió el pene" jajajajaaaaaaaaaaaaaaaa
¡jjajajajaaj Bueno, es que hay quién no sabe de tamaños!
ResponderEliminarLos que salen peleones no les importa lo grande que sea el de enfrente. Yo tuve un pequinés que en mi casa decíamos que tenía alma de Gran Danés :P
Besazo