Hablo de la muerte en lunes o viernes, da igual. Que si martes o domingo nada tiene sentido cuando hablar de ella se trata. Morir o no morir sin duda y sin temor, abriendo los brazos para que quepa todo el pasado posible, sin olvidar las alegrías. Un paso más hacia un mundo que nadie sabe que existe pero que la mayoría supone como algo mejor. Como las nubes que ves, sabes que existen pero nunca las puedes tocar.
Morir hoy, mañana, el jueves quizás sin temer al olvido o al adiós. Muerte no es sinónimo de tristeza, muerte es sinónimo de liberación. Aceptar dar ese paso sin miedo al interior del círculo vicioso del ¨Nunca más¨.
Morir de amor, de besos, de caricias en la mañana, en la noche pero acariciada. Morir para vivir en el recuerdo de compases del un dos tres de una guitarra michoacana o de unos viejitos que no lo son. Jóvenes disfrazados con arrugas sin vivir, como besos que no se han dado.
Morir en el orgasmo sorpresivo de una quinceañera curiosa o de una anciana solitaria que había olvidado el sabor de sus manos. Morir sin tregua a la sensación de lo desconocido.
Morir de angustia, de dolor, de desencanto. Morir porque veniste. Morir porque te vas. Morir porque Sí. Morir porque No.
Morir de risa. Morir de dolor por el recuerdo insano de alguien que no está pero su dejo se quedó flotando en las neuronas moribundas. Morir en carcajadas de alegría sin pausa en una noche decadente de amor, frente a una iglesia adornada de blancos cirios. Cerrada a los viejos tiempos, testigo marchito de un amor sin causas ni designios. Lugares comunes aferrados a un viejo teatro que se cae de pobreza pero que se levanta cada noche en aras de una alegría populachera, sin ton ni son. Lugares comunes de las vidas vacías de gente desconocida unida por las risas de un bufón grotesco e irrespetuoso. Fotografía borrosa de dos que no saben si se aman más.
Morir en silencios disolutos de personajes políticos manoseados una y otra y otra vez en bocas llenas de palabras soeces.
Resucitar después de dos horas al ver que la vida sigue afuera, donde las personas caminan sin mirar a nadie más que a su cotidianidad.
Hablo de la muerte sin miedos ni temores, como lo he hecho desde tiempo ha en que la muerte se convirtió en mi sombra.
Morir en miércoles sin preocuparse que sea media semana. Morir en sábado cuando todos están, alegoría de llantos grabados por cada funeral presenciado.
Vivir un rato para morir por siempre pegada a las hojas de los árboles que te vieron ir pero jamás regresar. Polen estéril de flores marchitas sin color y sin cauce. La vida no es muerte, morir es una vida sin caducidad en el nunca.
*La fotito es mía de mi.
Oye la foto esta muy padre!!
ResponderEliminarMori acompañada, morir dormida, morir en medio de un orgasmo, morir llorando.
Ojala pudieramos elegir la manera, pero la vida nos tiene guardada cada cosa!!
Buen lunes Ahijada!! Besos
has hecho del tema de la muerte, un post lleno de vida. un beso.
ResponderEliminaralgo ha pasado... ¡ya no veo al pato! juro que yo no lo maté, fue fuenteovejuna, ¡sí señor!
ResponderEliminarVivir, es morir para vivir. Y tu post es demasiado profundo para querer morir.
ResponderEliminarUn beso!
que entra a . me gusto amiga
ResponderEliminarQué buena eres! Tú has leído bien este texto? Creo que es una de las cosas más estupendas que has escrito. Por la lucidez, el encanto y esa omnipotente realidad que sobrevuela todo el tiempo...
ResponderEliminarDe todo corazón, felicitaciones por esta entrada!
Besos porteños, linda Flor!
Hola Malque!!! Hablar de muerte es lo mismo que hablar de vida en todas las culturas, porque siempre nos aferramos a la esperanza de otra vida. Y como bien dices hay multitud de formas... morir de risa, de amor, de dolor... fíjate que son conceptos antagónicos unidos a la palabra muerte que en principio es negativo... que no quiero filosofar más porque me acabaré liando conmigo misma. Besos cariñosos desde España.
ResponderEliminarDice Shakespeare por ahí, quien muere hoy no ha de morir mañana...eso es positivo...
ResponderEliminarYa pero esos morires que relatas son un decir coloquial.
ResponderEliminarDejar de vivir, morir de verdad, sobre todo con dolor, es una tremenda putada, amiga...
Besos y salud
hola malque...yo aun no he muerto...espera creo que ni siquiera he vivido...se puede morir sin vivir?...creo que soy un zombie...bueno si fuera zombie entonces ya viví y ahora estoy muerto...es complicado saber su estado de animo vivo o muerto...yo también te echo de menos muchooooo espero ya no tener tiempo para tener tiempo...si sabes como no?
ResponderEliminarhola malque...yo aun no he muerto...espera creo que ni siquiera he vivido...se puede morir sin vivir?...creo que soy un zombie...bueno si fuera zombie entonces ya viví y ahora estoy muerto...es complicado saber su estado de animo vivo o muerto...yo también te echo de menos muchooooo espero ya no tener tiempo para tener tiempo...si sabes como no?
ResponderEliminarMi abuelo decía mi nombre y el de mi tio mientras agonizaba... y murió después de vernos a los dos u__u
ResponderEliminarYo siempre lo he dicho, al momento de morir, quiero que alguien a quien yo ame en verdad sostenga mi mano, con eso me bastaría para morir sonriendo :B
Saludos, Malque ^^
Morir es seguir viviendo en espíritu.
ResponderEliminar"o de una anciana solitaria que había olvidado el sabor de sus manos".
Muy buena esta figura, Malque.
Besos.
irse a dormir no es una muerte reparadora...?...siempre digo que estoy muerta hace rato....supongo que la diferencia será un silencio absoluto...
ResponderEliminarExisten tantas cosas de que morir, morimos todos los dias y a veces en una hora morimos tambien, la muerte nos acompaña desde el momento que echamos el primer berrido, es una compañera conocida y a veces bienhechora, por lo tanto no debemos temer que otros nos maten, pues nosotros tambien hemos matado alguna vez. Posiblemente la muerte nos lleve a ese lugar de donde salimos cuando nacimos.
ResponderEliminarBesos
eeeeeeeeeeyyy!!
ResponderEliminarquién dijo que la muerte daba miedo?
Seguro es porque no ha leído esto...
Besotes mi queridísima Florecita.
Me encantó verte ayer.
Gracias por estar.
Lo peor es estar muerto en vida.
ResponderEliminarNo hay resurrección ni milagro alguno para compensar todo ese derroche de vida.
Y sé de que hablo.
Besos.
Qué bien terminas este texto que se mueve entre lo poético y narrativo, con una ironía sutil sobre la muerte
ResponderEliminar" morir es una vida sin caducidad en el nunca.".
Un beso grande. carlos
cuando mi abuela murio, vi su mirada, como si estuviera viendo llegar a la muerte por ella, y en serio que fue una mirada tranquila, hermosa diria yo.
ResponderEliminarsaludos malque...
A veces morimos de tantantas formas en un día que tal ve no nos damos cuenta, pero para renacer hay que morir.
ResponderEliminarSaludos malque
Este escrito es algo muy grande, esta lleno de fuerza poetica y con una intensidad de sabiduria realmente admirable, me he quedado fascinado con esta magistral obra ante la cual solo puedo quedar encantado, me ha gustado tanto , me siento tan honrado de poder contar con la amistad de quien, con su inspiracion y erudicion, ha podido crear esta obra maestra ...........saludos = )
ResponderEliminarComparto exactamente lo que dice Toro , pero lo leo y que triste me pone :(
ResponderEliminarBss
Coincido contigo la muerte es liberación, he visto gente que sufria muchísimo y que solo podía ser aliviado en los brazos de la muerte! La muerte es democrática! Jejejeje No distingue rangos, ni sexo, ni condición social, se lleva a toditos! Incluso a Lazaro (que de nada sirvió que lo resucitaran) porque luego se lo volvió a llevar la pelona!! (el solo se murió 2 veces! Tu le ganaste) Yo no le temo a mi muerte! Pero me aterra pensar en la muerte de las personas que quiero!
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