Hace días cuando se rompió mi familia lo primero que pensé después de recibir el golpe fue cerrar el blog. Eso sucede desde que comencé a escribir pendejadas. Cerrar el blog para no tener distractores. Escribir es el cordel que ata la realidad con los sueños. La idea de cerrarlo no germina porque no quiero perder la capacidad de soñar. Le doy vueltas y vueltas en como hacerlo de la mejor manera. ¿Ven como me distraje de lo que nos -mi familia y yo- estaba pasando? Necesito tener la cabeza vacía para pensar.
Existo luego pienso. Vivir es la consigna. La locura exige toda mi atención. Dejemos las virtualidades para después.
La voz de Barry me devuelve a la realidad. Miro su cara de susto. En las manos tiene los trozos de mi familia.
-¿Qué vamos a hacer?- Pregunta.
Yoi que no soy más que un ente aterrorizado contesto: Trae pa' cá vamos a pegarlo.
Soy experta en resarcir resquebrajos -dije- pero vamos a decirle a Laura y a Bruno que nos ayuden. 'tonces nosotros tres aquí valientes pero asustados y Bruno tan lejos -bendito whatsapp- fuimos uniendo trozo a trozo todas las partes rotas. Sin echarle un vistazo al blog para no empaparme de optimismo seguimos la vida. La vida que ustedes pierden mientras me leen.
La cosa es que la virtualidad está unida a la real. No atada, unida. Pensar en cerrar el blog es como cuando pensaba suicidarme. Lo pienso no hago. Soy aprendiz de suicida marca patito. Chafa pues porque los suicidas se matan no lo andan anunciando. ¡Ay miren me voy a tirar de lo alto de mi cama! ¡Ayúdenme! Blah. Fin.
El domingo empieza la semana. Hoy es lunes por si no se habían dado cuenta ya se los aviso. Abrí los ojos, lei algo que me puso triste. Carajo tengo una facilidad para ponerme triste. Nada, nada no pasa nada Flor tú eres más que tu melancolía.
Saludé a mi gato que no es mi gato pero bla bla bla. Recorro su rabito con mi mano a manera de saludo. Le sirvo el desayuno. Pinche gato suertudo ni Barry tiene ese privilegio. Vuelvo a mi vida normal. Es lunes. Mi familia está unida. Yo sigo con mi puto blog soñando que soy escribidora y rezando -si ¿Y qué?- por la cura de todos mis males. No se rían. Ya sé que la cura la tengo en mis manos pero qué le voy a hacer. Soy ciega por elección.
Alguien decía que cambiara el nombre de mi blog porque es un sin sentido. Según yo la gente recuerda más a los que pierden con la cara al sol que a los que se levantan con una sonrisa todos los días.
Que mi familia se haya roto fue un golpe muy fuerte. Eso no hizo que cerrara mi blog. ¿Hay un golpe más duro que ese? Sí, que Barry deje de amarme. Por cierto ¿Ya les dije que alguien me donó medicina -la más cara de las que tomo- para cinco meses? ¿Saben lo que es cinco meses! Pues eso. Un gasto menos. Gracias srita de Guadalajara.
Y ya es todo. Como le dije a mi hija hace rato por whatsapp, "T smo" que significa Te amo. A ustedes tambiën los amo a otros nomás los quiero tampoco es ir por la vida de fácil. Después de todo la locura se vive bien con una pizca de cordura. Y por si acaso no lo hubiesen notado, estoy loca de atar. Gracias. Al rato vuelvo a corregir errores y resarcir entuertos. La Bella viene en camino y eso señores requiere una mente lúcida. No me distraigan. Estoy interpretando el papel más complejo de mi vida: ser abuela.