(Cuento de lunes pa´ manecer martes porque pa´jueves nunca será)
Después de recorrer el mundo cosechando innumerables triunfos ha llegado a este lugar alejado de la civilización la Gran Orquesta Sinfónica de Grillos Alucinantes dirigidos por el excelso tenor José Dosbarrios de Altas Alcurnias quién además funge como solista, director de orquesta, capitán del barco y taquillero cuando se ofrece.
El concierto en do mejor que hoy presentan a cuatro patas de su éxito mundial ¨Para no dormir¨, los afamados pianistas Juan y Rudifuldo Gómez Perellón, haciendo parada especial de esta gira en colaboración con Gabino Torrelaguna, barítono de bajos vuelos caído en desgracia tras el abandono de su amada de toda la vida Loretta Armengol Pérez Collazo. Nadie nunca antes cayó más bajo del suelo porque no había donde más caer.
También estarán en el escenario la mezzosoprano Águeda Saltelongo y el barítono Carmelo Martínez Pérezruíz y Sánchez en su gira de despedida del bel canto.
El evento está programado a la medianoche en la casa de la esquina donde siempre se ha ubicado. Para más señas la de zaguán rojo y blanco, ahí merito. Un letrero de barro de Oaxaca con la leyenda ¨Este hogar es católico, no admite protestantes¨ indica que ya llegaron.
Los asistentes podrán deleitarse como si estuviesen en primera fila, que digo en primera fila como si estuviesen pegaditos a sus oídos los grillos sinfónicos.
En la sala, en la cocina, en el patio trasero, en los baños, en las escaleras, en el hall, arriba del baúl, etc. Donde ustedes se encuentren en absoluta comodidad podrán sentarse, acostarse, permanecer como soldados en formación. Como se les antoje. La acústica es muy buena.
Se recomienda tener mucha paciencia dado que los grillos músicos no se callan hasta que se callan. Ni antes ni después porque así son ellos, un poco necios.
Habrá un pequeño intermedio cuando a algún músico se le de la gana estirar las patas. Nadie podrá abandonar el anfiteatro so pena de ser abucheados por los presentes. Aí se lo haigan si se les ocurre salir manque sea a fumarse un cigarrillo de hoja verde.
Si la dicha es mucha y el placer es poco podrán terminar la noche sin haber pegado el ojo pero muy felices. Los ojos de cotorra llorona se desinflaman con bolsitas de té de manzanilla sobre los párpados. No vayan a creer que tomado ¿eh?
Al final del concierto podrán acercarse a los grillos digo a los músicos para hacerles una que otra observación (por si acaso exista alguno que no haya visto los bichos de cerca y quieran saber de qué color tienen los ojos).
Como cortesía de la casa se ofrecerá un ambigú consistente en croquetas de malvón, salpicón de huele de noche, orugas tibetanas en salmuera. Croissant engarzado con volutas de jamón serrano traído de allá muy lejotes. Macerado de lomo de mosco zancudo. De postre Parfait de leche de cabra sangrona y Patas de araña esquinera rociada de chocolate blanco con un pis de licor de borlote.
Todo servido con los mejores vinos traídos de los exclusivos viñedos de Dn Pedro de la Garza y Garza de los Garzas ubicados por donde vive la señora de los tacos. No la de delantal y rebozo de bolita. Esa no. Yo digo la de los tacos de guisado de a dos por cinco o tres por diez según les salga más barato.
El personal de servicio vestido de etiqueta les atenderá en cuanto asomen las antenas. La propina -aquí si se da propina porque es mi cuento- corre por cuenta de la casa del afamado historiador y cronista de Contry Sorprais Thelmo Cienfuegos Almaraz y Ruíz de la Barquera. Miembro de la más rancia alcurnia del pueblito dicho mero arribita.
Pasada la sepasecuanta última presentación, las dos trompetas de José y Ebanibaldo Ternera de la Concha se unirán al grupo porque después de escuchar a la sinfónica se miraron a los ojos, ambos dos a la par de juntos diciéndose a la voz de ya: a esta orquesta le faltan dos afamados trompetistas de la vieja guardia. Pidieron su incorporación y pus ya, les dijeron que sí. Total qué tanto es tantito.
El qui sedes ad dexteram patris correrá a cargo de la Sra. Tlaconeta Rosa María Corona Rosales, poniendo fin a este glorioso y bienhadado concierto.
Ayy se me olvidaban las trompetas. Sacando las mejores notas, el trío de Los hermanos Alcocer de los Alcocer del Barrio Bajo a la entrada de la cocina. Tres bellas y hermosas cucarachas tocando con el alma en las patas.
Dicho lo dicho, nada en entredicho.
Dress code: Rigurosa etiqueta.
Quedan cordialmente invitados al último concierto que se celebrará antes de la llegada de La Gran Fumigación, fechada para la próxima semana.
Los esperamos pero apúrenle muchachos, órale, hombre, ¡córranle!
Atentamente
Los habitantes de aquí merito del patio trasero.
Tan Tan