-¿Cómo se va a curar si no toma la medicina?- preguntó el neurólogo. -Así no se puede- dijo agarrándose la cabeza en señal de desaprobación.
-Las contraindicaciones me inquietaron decidiendo no tomarla. Junto con los antidepresivos el panorama es aterrorizante- contesté.
-Parálisis agitante es lo que sigue-
Acudo al neurólogo sin crearme expectativas. Teniendo una enfermedad neurodegenerativa no hay más que esperar. Todo avanza, ni un paso atrás o detenerse siquiera. Ni maíz palomas, ya te fregaste. Florecita, Florecita ¿dónde estás que no te veo? Me gusta esa canción un muchito.
El médico no me reconoció. Las condiciones en las que estaba eran por demás deplorables. Me temblaba hasta el apellido.
-Nunca la había visto así- dijo mirando a Barry.
Pogh y su novia nos acompañaron junto con La Bella. Sin saber qué hacer al verme salir, comenzaron a caminar. No atinaron a ayudar a Barry conmigo. Tomando a Natalia de la mano nos dirigimos al coche.
¨Parálisis agitante¨, suena feo ¿no? Mi cuerpo se moverá sin control pero yo no podré hacerlo por mí misma.
El titiritero destino se cansó. Soltando los hilos de mi voluntad me está dejando a la deriva y sin timón como dice Enrique. Como él, nunca me perdí, siempre seguí el camino correcto.
Como sea, no puedo hacer una tragedia como las que acostumbro, Natalia me vería. No puedo dejarle ver a una abuela abatida si siempre le he dicho que no se llora por nada.
Además ya no lloro.
-Las contraindicaciones me inquietaron decidiendo no tomarla. Junto con los antidepresivos el panorama es aterrorizante- contesté.
-Parálisis agitante es lo que sigue-
Acudo al neurólogo sin crearme expectativas. Teniendo una enfermedad neurodegenerativa no hay más que esperar. Todo avanza, ni un paso atrás o detenerse siquiera. Ni maíz palomas, ya te fregaste. Florecita, Florecita ¿dónde estás que no te veo? Me gusta esa canción un muchito.
El médico no me reconoció. Las condiciones en las que estaba eran por demás deplorables. Me temblaba hasta el apellido.
-Nunca la había visto así- dijo mirando a Barry.
Pogh y su novia nos acompañaron junto con La Bella. Sin saber qué hacer al verme salir, comenzaron a caminar. No atinaron a ayudar a Barry conmigo. Tomando a Natalia de la mano nos dirigimos al coche.
¨Parálisis agitante¨, suena feo ¿no? Mi cuerpo se moverá sin control pero yo no podré hacerlo por mí misma.
El titiritero destino se cansó. Soltando los hilos de mi voluntad me está dejando a la deriva y sin timón como dice Enrique. Como él, nunca me perdí, siempre seguí el camino correcto.
Como sea, no puedo hacer una tragedia como las que acostumbro, Natalia me vería. No puedo dejarle ver a una abuela abatida si siempre le he dicho que no se llora por nada.
Además ya no lloro.
Hoy quiero comentarte con el poema que te escribí y que tienes siempre puesto aquí abajo.
ResponderEliminarTambién quiero darte mi mano y temblar contigo.
De corazón.
PARA LA MALQUERIDA
La Malque es un corazón
de sol escondido
y mil silencios largos.
Es beso de agua
y luz de ciegos
en el desierto diario.
La leo y me leo.
La leo y la siento.
La leo y la quiero.
Vamos de la mano
desconocidos
y alejados
por los caminos
rotos y astillados
de la vida cansada
y del tiempo huraño.
Refunfuñamos por todo
y hasta en el infierno
tienen miedo
de que un día aciago
lleguen nuestros pasos.
Chocamos con mil horas
arañamos las rutinas
odiamos la compasión
nos dan risa los ángeles
y mucha pena los diablos.
Nos cansa todo
y más que nada
el resto de los humanos.
A veces herviríamos
a los que nos rodean
y otras daríamos la vida
por hacer reír a un chavo.
La Malque es un corazón
de sol escondido
y mil silencios largos.
Toro Salvaje
Fuerza desde aquí... Mas de la que de por si tienes.
ResponderEliminarCreo que a veces las palabras sobran... Y no quiero sólo decir algo tan vacío como "ya veras que todo saldrá bien, solo por decir algo".
Pero si te diré que mientras todos te apoyen... Siempre será mas firme cada paso que te toque dar.
Abrazo y mucha fuerza.
Fuerza desde aquí... Mas de la que de por si tienes.
ResponderEliminarCreo que a veces las palabras sobran... Y no quiero sólo decir algo tan vacío como "ya veras que todo saldrá bien, solo por decir algo".
Pero si te diré que mientras todos te apoyen... Siempre será mas firme cada paso que te toque dar.
Abrazo y mucha fuerza.
Pues la cabeza te sigue funcionando de puta madre.
ResponderEliminarMuchos besos, chamaca.
Me duele la reacción de este médico, lo siento realmente Malque!!
ResponderEliminarEntiendo que de tu parte tenés que cumplir con la medicación pero la tarea de un profesional de la salud no termina en dar la orden y que se cumpla! Somos seres humanos y no sufrimos solamente por la enfermedad física... su deber es acompañar al paciente también desde la palabra... y que sea de contención y no de reproche... y con afecto, que en definitiva es lo único que nos hace sentir un poco mejor!
Te mando un abrazo fuerte!
Un fuerte abrazo Malque! Te temblara todo, pero tendrás la palabra firme y sujeta, para nosotros, agradecidos lectores.
ResponderEliminarMi querida Malquerida aunque el proceso es un avance sin parón, tu puedes hacer que sea menos y te mantienes constante y haces caso de todo.
ResponderEliminarDesde aquí te mando todo mi cariño y fuerza para que no te vengas abajo.
Besos
Un beso muy grande, Malque. Pero muy, muy grande.
ResponderEliminarPero Malque, déjate de vainas de efectos secundarios y tomate las medicinas, yo tomo 6 pastillas diferentes, si hago caso a los efectos secundarios que dice el prospecto que tiene cada una, no vivo, solo espero que no lo tengan y mira, no lo tienen o yo no lo noto, que para el caso es lo mismo, pero es que aunque lo tuvieran tendría que tomarlas igual porque de lo contrario se me paralizaría el corazón y otras lindezas, así que mas vale lo malo conocido que lo bueno por conocer. En cualquier caso el que sabe es el médico, tienes que hacerle caso, y si no le tienes confianza, cámbialo por otro, yo te hablo de lo que aquí podemos hacer con la Seguridad Social, todavia, porque las cosas se están poniendo muy chungas... :)
ResponderEliminarBesos y salud
Un beso enorme, mi querida Malque.
ResponderEliminarLinda Flor de María.
Otro para Bella.
El poema de Toro...es que lo dice todo...
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte,Malque.
Así son los médicos, si no les hacemos caso, ellos reaccionan de la peor manera y le auguran a uno los peores tormentos.
ResponderEliminarEs que algunos de sus pacientes los han acostumbrado mal y ellos se creen dioses y que su receta es la Ley. ¡Mándalo a la mierda! Eso es lo que yo hago.
Querida Malque,
ResponderEliminarCon lo lúcida que eres ya debes saber todo esto, pero no está demás refrescarlo:
"En general, esta enfermedad se manifiesta en la persona que tiene miedo de no poder retener a alguien o a algo; por esta razón, comienza en las manos.
El enfermo es una persona rígida que desde mucho tiempo atrás se ha reprimido para ocultar su sensibilidad, su vulnerabilidad, su ansiedad y sus temores, sobre todo en sus momentos de indecisión.
Su mayor deseo era controlarlo todo y ahora su enfermedad le dice que ha llegado a su límite y que no puede hacerlo, ni para sí misma ni para los demás.
Su sistema nervioso se ha cansado de mantener toda esa tensión interior que él creó para ocultar todo lo que sentía.
Por ser una enfermedad que evoluciona lentamente, la persona afectada tiene la oportunidad de revertir el proceso.
Si este es tu caso, aprende a confiar más en el Universo y en la gente.
Revisa tus ideas con respecto a ceder ante los resultados que obtienes y los de los demás.
Tu parte interna, aquella que cree que tú y los demás debéis conteneros para que todo sea perfecto, está exhausta.
Date el derecho de no ser perfecto, de estar indeciso e incluso de equivocarte.
De este modo te será más fácil darles ese derecho a los demás.
De la misma manera, acepta la idea de que es muy humano tener miedo y de que no puedes ser el hombre o la mujer perfecta que creíste debías ser.
Cuando tiemblo, es porque siento o veo un peligro que me amenaza o amenaza a una persona a quien quiero; bien el temor a perder el control (¡el cual voy perdiendo cada vez más!), la inseguridad o la impotencia de progresar en la vida.
También puedo haber vivido un traumatismo: un abuso o dificultades que dejaron huellas y frente a las cuales vivo los sentimientos siguientes: pena, frustración, culpabilidad, rabia, depresión que me llevan al agotamiento, al desánimo y que quiero huir en vez de enfrentarme a ellos y resolverlos.
Me auto destruyo lentamente, produciendo el deterioro de la función nerviosa actual.
Una impotencia al nivel de la motricidad de mis miembros superiores (en particular mis brazos y mis manos) tiene su origen muy frecuentemente en una situación que vivo en la cual quería rechazar a una persona, una cosa o un acontecimiento o, al contrario, la quería retener y me sentí incapaz de ello (bien físicamente o moralmente).
Si están afectados los miembros inferiores (mis piernas y mis pies), es con ellos que me hubiese gustado rechazar o volver a traer a mí la persona, cosa o acontecimiento de referencia.
Tengo el placer de huir esta situación en la cual me siento desbordado y que percibo sin salida.
Debo reasumirme y aprender a controlar MI vida y no la de los demás, haciendo confianza en la Vida y decirme que merezco vivir".
Abrazos
aqui, llorando por ti... :(
ResponderEliminarMi Flor, no suspendas tratamientos!!! Atiende a los efectos paliativos y no los secundarios. Deja de atentar contra ti misma, por favor. No seas cabezona.
ResponderEliminarUn beso.
Un abrazo y un beso gigante, amor. Si la medicación te ayuda piénsate si no es mejor tomarla.
ResponderEliminarBesos, besos y besos.
Y eres una chingona maravillosa, eso eres ...
ResponderEliminarUn beso enormeeeeeeeeeeeeeeeeeee ............
ResponderEliminarEs tu vida y tu cuerpo y tienes los años ganados a pulso y la suficiente madurez como para decidir, si tienes toda la información, los pros y los contras, qué es lo que más te conviene a ti por ti misma y lo que deseas.
Yo te ofrezco mi profundo respeto y todo mi apoyo, decidas lo que decidas y hagas lo que hagas.
Y, uniéndome también al precioso y cariñoso comentario de Xavi... te mando un fuerte y cálido abrazo y un puñado de besos.
Por favor hazle caso a los médicos alguna vez. Besos.
ResponderEliminarEs mejor no leer los efe tos secundaris de nada.
ResponderEliminarNo sé què decirte ya.
Tienes una personalidad muy fuerte. Un abrazo.
es mejor que tomes tus medicinas sin preocuparte de las contraindicaciones, ya que si ellas aparecen el médico te cambiará la medicación y asunto arreglado.
ResponderEliminarno te preocupes por nada y más bien deja que otro (en este caso el doctor) se preocupe por ti.
besos
Toma los remedios!!! por suerte estamos al alcance de medicaciones que por lo menos, facilitan el día a día. Piensa que en otra época, no las tenían y no tenían opciones.
ResponderEliminarÁnimo!!!
Sé que sabes qué hacer con tu vida a estas alturas...
ResponderEliminarY confío en tu buen criterio para saber lo que más te conviene.
Soy malísima dando consejos, y además muy poco recomendable.
Eso sí, no te agüites, ni te me achicopales, ni modo, eh?
Escribe, pasea, y vive como sólo tú sabes hacerlo, a tu ritmo;)
Besos, pendejoncita linda!!
Un abrazo muy fuerte.
ResponderEliminar