Me he perdido en el tiempo. La brújula se ha estropeado. Ignoro qué día vivo. Si es domingo o lunes. Siento los ojos llenos de arenilla. Cuesta trabajo mantenerlos abiertos. Extraviada estoy en estos días de no dormir a hora fija. Los espacios discurren en mis dedos. ¿Cuándo me perdí? Si es domingo quiero ir al cine, hace mucho tiempo que no voy.
Si acaso fuese domingo puede que coma fuera, atascándome de comida chatarra. Vicio adquirido en la niñez. El sí de los padres malogran las virtudes de una niña caprichosa y sin amigos que hace de su palabra ley. Mandato divino. Nada que discutir.
Si es lunes me levantaré temprano. Siempre ocurre. Han comenzado las vacaciones. Tengo la vida para mi solita. Tan te quiero tanto. Qué más da si no lo digo. No encuentro qué hacer con ella, con mi vida digo. Duermo de día, despierto de noche. Los ojos con arenilla impiden ver más allá de la punta de mis pies. Mis labios húmedos y consecuentes quieren hablar. Decir algo, saber qué día es.
He pisado un grillo. Ya no habrá historia.
¿Domingo o lunes? Nadie a quién preguntar. Estoy perdida en el gris ignominioso de una vida calladita. Noche volviéndose día con el adiós de las estrellas. De noche mis padres vienen. Poesía para un domingo sin excusas. Mis dedos tiemblan en esta hora doblemente insensata. Escribir es cuestión de tener tiempo y paciencia. El tema aparece sin ser nombrado. Nadie entenderá. Esto es así. Las letras también están solas. Vete de mí mentecato ser que arruinas mis desvelos. Deja que vuelva la cordura en este día que se avecina sin nombre. Un pensar tan sin embargo y mi pelo peinado para ningún lado. Perfume de Flor de María dame cobijo en tus quebrantos. Oríllame al suicidio entre tus brazos.
Los días serán para mi. ¡Córtale ya! Termina tu relato sin pies ni cabeza y vete a dormir que va a ser hora de despertar y los gallos no tendrán a quien cantarle. Duerme los días. Las noches son más de leer. Nada de lo que diga quedara escrito en la memoria de mis muertos. Calla mujer calla y cierra los ojos.
Incluso los gatos duermen los domingos, ¿Los lunes también? Cómo saberlo si ni siquiera sé el día que vivo.
Si acaso fuese domingo puede que coma fuera, atascándome de comida chatarra. Vicio adquirido en la niñez. El sí de los padres malogran las virtudes de una niña caprichosa y sin amigos que hace de su palabra ley. Mandato divino. Nada que discutir.
Si es lunes me levantaré temprano. Siempre ocurre. Han comenzado las vacaciones. Tengo la vida para mi solita. Tan te quiero tanto. Qué más da si no lo digo. No encuentro qué hacer con ella, con mi vida digo. Duermo de día, despierto de noche. Los ojos con arenilla impiden ver más allá de la punta de mis pies. Mis labios húmedos y consecuentes quieren hablar. Decir algo, saber qué día es.
He pisado un grillo. Ya no habrá historia.
¿Domingo o lunes? Nadie a quién preguntar. Estoy perdida en el gris ignominioso de una vida calladita. Noche volviéndose día con el adiós de las estrellas. De noche mis padres vienen. Poesía para un domingo sin excusas. Mis dedos tiemblan en esta hora doblemente insensata. Escribir es cuestión de tener tiempo y paciencia. El tema aparece sin ser nombrado. Nadie entenderá. Esto es así. Las letras también están solas. Vete de mí mentecato ser que arruinas mis desvelos. Deja que vuelva la cordura en este día que se avecina sin nombre. Un pensar tan sin embargo y mi pelo peinado para ningún lado. Perfume de Flor de María dame cobijo en tus quebrantos. Oríllame al suicidio entre tus brazos.
Los días serán para mi. ¡Córtale ya! Termina tu relato sin pies ni cabeza y vete a dormir que va a ser hora de despertar y los gallos no tendrán a quien cantarle. Duerme los días. Las noches son más de leer. Nada de lo que diga quedara escrito en la memoria de mis muertos. Calla mujer calla y cierra los ojos.
Incluso los gatos duermen los domingos, ¿Los lunes también? Cómo saberlo si ni siquiera sé el día que vivo.
En mis días perdidos, esos como bien dices, que no sabes si es Lunes o Domingo, para mi son para holgazanear, tirarme en el sofá y gritar sin voz.
ResponderEliminarEspero que la arenilla desaparezca, eso sí, escribe lo que quieras, desnuda o vestida...pero escribe.
Un beso
¿Qué día es Musa? Dime quë día es. Sólo eso.
Eliminarel tiempo... esa brújula que nos ata...
ResponderEliminar"ni siquiera sé el día que vivo" quizás sea la experiencia de mayor libertad que te hayas imaginado!
(me encantó tu frase: "El sí de los padres malogran las virtudes de una niña caprichosa y sin amigos que hace de su palabra ley.")
beso grande,
¿Qué dis es Mónica?
EliminarYa está. Es lunes. Sólo ha bastado con ver la fecha de mi post. Como nunca me leo esos pequeños detalles pueden volverme la lucidez.
EliminarGracias niñas.
Mis labios húmedos y consecuentes quieren hablar. /// Siempre querrán hablar! Beso Malque!
ResponderEliminar¿Que importa que dia es? ¡Ni la hora! ¡ni nada de nada!, somos libres para hacer lo que nos venga en gana.
ResponderEliminarBesos
Te voy a contar un cuento corto: Había una vez un put* lunes de mierd*. Fin.
ResponderEliminarRespira porque ya mañana es martes. Beso
A mi me pasa eso muchas veces, no saber ni el día que es y me pasó que una vez no supe ni el año, y no es mentira jajajaja. Besito querida Malque.
ResponderEliminarEs lunes, con sabor a miércoles.
ResponderEliminarY que importa,el día que es?
ResponderEliminartodos los días son buenos para leerte amiga.abrazos miles.
POS QUE MAS DA QUE DÍA SEA...
ResponderEliminarABRAZOS
CARLOS
La Malquerida centrifugando su corazón.
ResponderEliminarAhora lo tiendes y que se seque al sol.
Besos.
Mañana será otro día. Saludo.
ResponderEliminarLo de no ponerte el reloj, porque no tienes necesidad de saber la hora, es una bendición. Poder prescindir de conocer el día tiene que estar mejor todavía. Lo de no interesarse por el mes tiene que ser la leche. Cuando podamos despreocuparnos del año seremos libres de verdad.
ResponderEliminarBesos, chamaquita.
Toda la culpa es del cambio climático y de la hora , yo también un poco desubicada con los días , besos de flor .
ResponderEliminar¡Es lunes! Será por eso que no sabes en qué día vives, porque los lunes son así con la resaca del fin de semana.
ResponderEliminarMe gustan mucho tus divagaciones, un encadenamiento de dudas, de hacer o no hacer, de sentirte solidaria con el gato dormilón...y todo contado con muchísimo talento literario. ¿Cómo si no iban a gustarme tanto estos desvaríos tuyos?.
Por si acaso, te recuerdo que mañana es martes.
Un abrazo.
Sin pies ni cabeza, es una bonita forma de pasar un tiempo, pero solo de vez en cuando :)
ResponderEliminarBesos y salud
para los gallos todos los días son iguales pues cantan invariablemente a las 5 am. no hay domingo de descanso para ellos.
ResponderEliminarlos gatos duermen de día y salen de noche a seducir gatas callejeras. el asunto les gusta tanto que al igual que los gallos, todos los días son iguales también para ellos.
los únicos aburridos somos nosotros los humanos que ni cantamos bien de día ni seducimos bien de noche a las chicas callejeras.
besos.
Hay dias perdidos, hay dias que no deberian existir, mas aun asi estan. No podemos elegir mas que el gato que queremos para nosotros. Solo nos queda tirar para delante y seguir. detenerse si vemos alguna pizca de luz y quizas ahi darnos cuenta la fragilidad de esta vida. Mi abrazo Malque
ResponderEliminarHoy te dejo mi abrazo
ResponderEliminardeja que los gatos duerman ...
... hay gatos que producen insomnios perennes intentando arrancar la piel a jirones que duerman o se vayan a maullar lejos muy lejos , que su ronroneo es puro engaño , solo despiertan cuando necesitan que les acaricien el lomo
.... diras buah esta divaga
no importa cada cual con su locura
y cada gato con sus miserias
feliz semana
Es algo bueno a veces eso de no saber qué día es. Un besote!!!!
ResponderEliminarMejor vivir en relatos donde uno desconoce los días y los gatos hacen a su antojo... Un abrazo.
ResponderEliminarMientras se pase bien y se pueda tirar hacia delante, lo demás no importa. Da lo mismo el mes, el día, el año y la hora. Cuando uno está chungo es cuando las fechas se graban, así que lo mejor no saber en el día que estás.
ResponderEliminarBesos Malque.
no se por que tengo la manía de querer controlar todo, incluso, hago inferencias sobre lo bien que puede ser un dia dependiendo del pasado, mi vida es jugar, vivir, disfrutar cada minuto, no importa si es martes y el perro pasa puntual a las 10 am y orina la llanta de mi auto, o si es sábado y estallo de euforia por que mi equipo hizo un gol...
ResponderEliminarUn abrazo Malque...
Este texto me produce una sensación de desasosiego, pero por otro lado me encanta la poética que encierra. Un escrito que me llegó.
ResponderEliminarUn beso grande, mi querida.
HD
creo que cada dia es importante, cada dia... hasta los lunes
ResponderEliminarA veces siento que hay una epoca de mi vida que no entra en mi cronologia oficial, esos dias que ni se distiguen uno del otro, saludos.
ResponderEliminarAqui nos desorientamos con tantos feriados
ResponderEliminarAbrazo
Nadie es feliz, no, ni por decreto ni por amor. Y es cierto, nadie nace para nadie. En Semana Santa: "Dios, perdónalos porque no sben lo que hacen". (Ni lo que dicen). ¿Qué? Si Dios existe necesariamente existe Satanás. Aún hay esperanza... Beso.
ResponderEliminarSalud.
A cada día, le duerme un gato, sí.
ResponderEliminarBesos, Malque.