Si no escribo lo que veo posiblemente olvide pronto. Hablo de amarrarme los zapatos. Virtudes pequeñas y hombres ciegos. Somníferos de amor. Vidas paralelas ¿En dónde está el cruce de él con ella?
Hablo de los ojos de mi madre en los de la tía menor. Visto así era ella metida en su mirada. Ojos tan suyos que de mi se apiadan. La virgen del Jolgorio. Abrazo tierno, tímido, de amor materno dado por los brazos de una tía lejana como rayos de luna. Flores secas. Yo las quiero. ¿Por qué? Son de ni madre. Asfixia mayor. Pido si algo quiero no terminar encerrada. Polvo libre, alas al viento. Mariposa fugaz.
¿Te dio tiempo de pensarme?
Catacumbas de desconsuelo.
El padre dijo: ¿Desde cuándo son hermanas? Pus desde que nacimos. Sacerdote mamón. Y yo con mi dolor de pecho. Ay. La iglesita es muy mona. La misa de la una es para ricos. Remilgos popoff. Narices levantadas. Aromas finos. Con razón los apellidos sonaban tan rimbombantes. A todos los conocí. Y yo. Ya sabes uno llega a codearse hasta con quien no debe.
El amor es asunto complejo para algunos.
No encuentro la salida. Ayúdame má.
De ti no me acuerdo. Me gusta que estés con nosotras. Te queremos un tanto demasiadísimo Barry de mi corazón ignoto.
No es que no pueda, es que no quiero. La foto lo dice. Tú y yo sin nada que nos una. Ni un listón de luto. ¿Ves esa casa? Era de la Gándara. ¡Maldición me acabo de acordar! Le mataron al hijo. Esa otra casa antes era pulquería. ¡Mira, la casa de Martha Elisa Ávila Villegas! Creo que por ahí vivía Silvia Coria Bedolla. ¿Quién diablos se apellida Bedolla? Casas viejas con olores nuevos. También me sé la historia de Manuel. Muy guapo él montado en su caballo bayo. La vida se le echó a perder porque le salió un tiro errado. ¡Bang! Vivía en el que llamo El callejón del beso. El que pasábamos corriendo aunque no quisiéramos. La fuerza de gravedad nos llevaba para adelante. ¿Te acuerdas? n'ombre qué te vas a acordar si estabas bien chiquita.
Te digo que al Manuel se le salió el tiro de una pistola. Mató a su primito. Tuvo que huir. No volvimos a saber de él.
El cementerio tiene una vista pre-cio-sa. Lástima que los muertos no puedan disfrutarla.
Una lista interminable de regalos de cumpleaños convertida en deseos de salud. Templete para una mente viva.
Ya quiero que sean vacaciones. Te dejo solo, a veces viene bien darle descanso a nuestro amor inmortal. Renacer en trozos. Aún no me acostumbro a la lejanía del cuerpo que amé. ¿Qué de la mente dices? Ahí si no me meto. Dos años y sigo aquí. ¿Alguien murió de amor? Yo tampoco. Creo que el amor como tal no existe. Algo con tanta definición no puede ser real.
Ya estás viejita. Y tú estás pendejo.
Las reuniones familiares cuentan de las distancias que no se rompen. Quiero ser Silvio. Sin miedo a la libertad. Apenas le abro la puerta sale disparado a la salida.
Hoy quisiera mi niña no estuvieras sufriendo pero no puedo hacer nada más que ofrecerte mi alma. Gajes del oficio.
Algún día dejaré de cantar sus sentires pero es que invariablemente sus letras que dicen no serlo me llevan a él.
Otro día más que bien puede no ser otro día menos.
Haiga sido como haiga sido. ¿Y si de veras creen que hablo así? Pus ya ni modo. Acaba, acaba y acábalo.
Tan tan.
en algunos pasajes me haces reír, en otros me haces reflexionar.
ResponderEliminarbesos.
Me gusta que te rías, eso es muy bueno :D
EliminarBesos DRACO
Menos PP y menos cementerio y menos Enrique (no sé qué ves en él) y más pendejo, tú escribe. Porque sí, y lo sé de fijo: hay gente que se muere sin ser dependiente; tal vez, entonces, por eso debemos dejar de perder el tiempo en cantar boleros y dotar de salud a los años altos de la vida queriéndonos más. Yo ya te quiero más. Beso.
ResponderEliminarSalud.
Y yo te quiero más que tú y que tú y que tú que tú que tú.
EliminarBesos llenos de querencias
Da gusto leerte, chamaca. Voy a repetir, con tu permiso.
ResponderEliminarBesos.
Muchas gracias por leer doble Chema. Un doble honor.
EliminarUn abrazo
Hay que leerte despacio.
ResponderEliminarCon lupa y con imaginación.
Es como desenterrar tesoros.
Besos.
Siempre es un placer saberme leída por Toro Salvaje. De cierto lo digo siempre.
EliminarUn beso MiToro
Te leo como dice Toro, pero de cualquier forma es una gozada.
ResponderEliminarGracias Tracy de cualquier forma.
EliminarUn beso
El otro día fui a unas pláticas para ser madrina de un bautizo. Y el vato que estaba dando la plática dijo que sólo Dios puede arreglar el desmadre que tengo en mi vida pero que debo arreglarlo antes de dejarlo entrar y pues mi cerebro está haciendo corto desde entonces. "Tu estás pendejo" es la mejor respuesta del mundo.
ResponderEliminar¡Pinche Vieja que gusto!
EliminarUna alegría enorme verte por aquí.
Le hubieras dicho al vato ese ¨estás pendejo¨ verás que te pediría te presentaras el mero día del bautizo :D
un gusto, ¡Vuelve siempre!
¡Qué sorpresa! Hacía días que no pasaba por aquí y la MaLque se ha puesto a escribir sin parar y yo he pasado largo rato, entretenida con sus letras variopintas de recuerdos y presentes.
ResponderEliminarFelicidades por la decisión de escribir más ya que mejor es difícil. Abrazo grande, grande. MaLque.
Mara, estoy intentando retomar el blog. Ha sido un poco difícil pero aí la llevo.
EliminarGracias mil por leerme.
Un abrazo enorme
Gracias Julio David. Aquí decimos Genio y figura...
ResponderEliminarUn abrazo